Sumario: | Vitrinas electrónicas, erótica ropa interior, jockstraps, esposas-candados en terciopelo, regalos porno, cámaras en vivo, gays-por-pago, habitaciones de chat, citas en línea, muñecas inflables, real-core, porno de horror, maquinas de sexo, selfies coquetas: disuelto y fastuoso, crudo y sobre-expuesto, el porno triunfa y se prolifera en todos lados, en la red de redes con contextos urbanos, con pantallas mediáticas en los intersticios del cotidiano. El porno invade las tramas de la vida pública, sobrecalienta las conexiones electrónicas e impregna de humores la socialidad contemporánea. Se forma ambiente. ¿Cuáles son los orígenes y la genealogía de esta escena convulsa? ¿Cuáles son sus efectos? ¿Cuál es la nueva condición que ahí se anuncia?
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